Glaciares, cascadas, cuevas de lava y paisajes que te dejan sin palabras.
Caminatas, ejercicios físicos y dinámicas de reconexión corporal.
Grupo reducido. Conversaciones reales. Momentos que recordarás siempre.
El origen no es un lugar. Es una sensación.
Me llamo Daniel. Y hace años descubrí que hay momentos en los que no basta con parar… hay que volver. Volver a la calma. Al cuerpo. A la naturaleza. A ti.
Así nació este viaje.
No es turismo. No es postureo. Es una experiencia real, salvaje, cruda y hermosa.
Una expedición en Islandia donde caminarás, reirás, te mojarás… y te reencontrarás.
Una aventura para quienes no se rinden, que no se quejan si llueve, y que saben que, a veces, hay que alejarse del ruido para escucharse mejor.
12 viajes al año. 12 oportunidades para cambiar tu vida.
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